Manchas y suciedad
La fea mancha que siempre queda, desconcertadamente inmune de ser borrada, prendida al material; sólo morirá, en lo posible, cuando éste de ser dejara. Suciedad se acumula en rincones, oscuros o aun claros en las habitaciones. En limpieza batalladora, en el trabajo fiel, en guerra con lo sucio, siempre se le combate. Pero el problema es: renace, vuelve; y en la vida espiritual, a veces, lo mismo acontece con manchas que en la persona persisten....